Hoy vamos a hacer un teléfono casero con latas. Seguro que
cuando eras peque tuviste uno! Esta manualidad es muy divertida para los peques,
pero también para ti... te transportará a tu infancia!
Construir sus propios juguetes les inculca valores como reutilizar, potencia su autonomía y su creatividad y lo pasan genial.
Construir sus propios juguetes les inculca valores como reutilizar, potencia su autonomía y su creatividad y lo pasan genial.
Materiales 2 latas de conserva (también puedes utilizar vasos de plástico de yogurt), punzón (o clavo y martillo), cuerda de algodón y cartulina decorada, papel Scrap o Washi Tape para decorar.
1. Haz un agujerito en el centro de la parte inferior de las latas
con un punzón, también puedes utilizar un clavo y martillo.
2. Pasa los extremos de la cuerda por cada uno de los agujeros, puedes poner un poco de celo en el extremo para que no se deshilache la cuerda y al dar rigidez pase mejor el cordón (puedes ayudarte de unas pinzas de cocina para tirar desde el interior de la lata).
3. Haz un nudo en cada extremo.
3. Haz un nudo en cada extremo.
El teléfono ya está listo! Ahora puedes decorarlo con cartulina de colores, papel Scrap o Washi Tape para que tú teléfono casero con latas sea superchulo.
Los peques ya pueden pasarlo en grande con este clásico de los juguetes caseros, sólo
tienen que tensar la cuerda y hablar, acercándose a la boca el envase, mientras
el otro se acerca el envase a la oreja. Es magia? Noooo, es ciencia! Podemos comunicarnos con otra persona a cierta distancia porque
las vibraciones de la voz viajan a través del hilo y la lata, que actúa como
caja de resonancia, amplifica el sonido. Es genial!
Tarde de entretenimiento y diversión asegurada!
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